Empiezo por contar un pequeño secreto...
El día anterior a las elecciones que determinaron que Mauricio Macri será el nuevo presidente de la Nación mi ansiedad ya estaba a tope y buscando algún tipo de "señal" me decidí a hacer una tirada de Tarot. Sí, de vez en cuando recurro a él y debo decir que nunca me defraudó. En este caso usé el Tarot egipcio...
No sabía qué tirada usar para que respondiera cual de ellos ganaría, Scioli o Macri. El Tarot no suele dar respuestas tan tajantes sino que necesitan de una cuidadosa interpretación. Fue allí que pensé que lo mejor sería hacer una tirada que me ayudara a saber cómo me sentiría yo durante la semana posterior a la elección. Sería la manera más segura de entender cual habría de ser el resultado electoral.
La tirada fue de tres cartas, que fueron las siguientes:
La Fuerza
La Vehemencia
El Apostolado
Son buenas cartas (a pesar de que todas tienen su cara y su contracara), pero El Apostolado me dio la respuesta que buscaba, más todavía porque fue la última carta, la que le daba el significado final al conjunto. Muy, pero muy sintéticamente les digo que uno de sus significados es el "sacrificio personal en pos de un bien u objetivo mayor, más elevado"
La Fuerza y La Vehemencia, también muy sintéticamente, son fuerza moral y enjundia para hacer frente a lo que se nos presente...
Si me resultó claro el significado para "ver" el resultado de la elección, hoy me queda mucho más claro aún en lo que respecta al futuro no sólo mío, sino de la sociedad en su conjunto. No solamente es por el Tarot (que seguramente muchos despreciarán o pensarán que prestarle atención es ridículo) sino por convicciones propias que pienso que a pesar de lo que sabemos que se vendrá con el macrismo en el poder no tenemos que volver a aquel nefasto pensamiento de los 90s del "sálvese quien pueda". A estas alturas tenemos que ser conscientes de que solos y aislados, nadie saldrá bien parado de la embestida que se avecina. Nadie se podrá "salvar" solo. Tal vez sí por algún tiempo, pero no demasiado.
Es en estas circunstancias que toma más fuerza la idea que lanzara CFK de "la Patria es el otro". No hay espacio para el "primero Yo" porque es suicidarse individual y colectivamente y es lo que justamente busca el enemigo, que seamos islas desconectadas una de la otra y por lo tanto, más fáciles de ocupar y colonizar.
Es primordial que ya mismo dejemos atrás la confusión y la tristeza por lo que no pudo ser. Es vital que ya mismo nos centremos en lo que hay que hacer corrigiendo errores para no ser barridos por el neoliberalismo. Para lograrlo vuelvo a lo que el Tarot y la lógica me indican que hacen falta: Fuerza de voluntad y de convicciones, Vehemencia para luchar por lo nuestro y lo de todos y El Apostolado de pensar en el conjunto y no sólo en uno mismo para alcanzar una nueva liberación de estas ideologías probadamente nefastas aquí y en el mundo entero...