¿Miedo?¿Inseguridad?¿Paranoia?: Haga patria, apague su televisor.

La inseguridad: qué tema, ¿no?

Es algo de lo que se habla todos los días en todas partes. Fue impuesto un poco por la realidad y otro poco (un poco/bastante, diría yo...) por los "medios".

Las personas ya incorporaron una cuota tal de paranoia que si existiera la intención (que no existe...) de disminuirlas, de bajar el nivel de "stress" respecto a éste tema, sería una tarea a largo plazo. A muy largo plazo. Salvo, desde luego, que hubiera una campaña igual y equivalente en sentido contrario a la que somos sometidos desde la radio, la prensa escrita y muy especialmente, desde la televisión.

Hasta llegué a cuidarme de no caminar demasiado cerca de otras personas para evitar que se dieran vuelta entre panicosas e inquisidoras, observándome como a un potencial delincuente. Me dan pena, sinceramente.

Tal vez yo sea muy inconciente, pero me resisto a vivir pendiente de cada hoja que mueve el viento, de cada ruido insignificante a mi alrededor, de cada paso de un distraído transeúnte. Vivir con semejante nivel de miedo no es vivir.
Y digo y reafirmo que es una paranoia impuesta desde los medios de comunicación, y no me retracto ni relativizaré esto.
Se me ocurren así, a la ligera, al menos tres posibles motivos (por separado o en un paquetito con moño y todo):

1.- Distraer la atención de lo que verdaderamente importa en el país y en el mundo en general. Cuando aparece algún hecho político o económico que es imposible obviar, mágicamente desaparecen o disminuyen a su mínima expresión los casos de violaciones, secuestros, asesinatos, robos, etc etc

2.- El simple y ezquisofrénico maratón por el rating entre canales de televisión, especialmente.
Cuanto más truculenta sea la noticia (o como se la presenta, en realidad), más subirán por la escalera los mágicos y malignos numeritos del rey rating.
Leía el otro día (algo por encima, admito) un artículo en el nuevo diario de Jorge Lanata (Crítica) acerca de éste tema y mencionaba una mini encuesta "casera" que hicieron sobre cómo se presentaban las noticias o qué tipo de temas abordaban en los noticieros televisivos. La gran mayoría eran temas del tipo delictivo. Y si no lo eran, buscaban la manera de hacerlos más truculentos. Las palabras que claramente se repetían más y en un porcentaje inaudito eran: tragedia, horror, tensión, pánico y las que se les ocurran de tipo similar. Siempre con la voz melodramática del locutor o la locutora. Ahora hay una nueva manera de hacer que un noticiero de una hora, sólo diga algo diferente durante no más de 15 minutos. Hacen una presentación antes de cada bloque de noticias y otra antes de cada tanda publicitaria. Cada una de esas presentaciones o anticipos de noticias se repiten a lo largo de toda la hora y duran al menos 2 o 3 minutos cada una, machacando con las palabrejas que les mencionaba antes, cosa de que el espectador quede con los pelos de punta y agarrado con las uñas al apoyabrazos de su sillón. O sea que, si cada bloque tiene una duración neta de 10 minutos, están entre 4 y 5 minutos anunciando los horrores por venir, pero de paso ya nos van inoculando miedo y angustia.

3.- La última razón que se me ocurre (pero que en definitiva creo que es la más importante y de verdad más aterradora que cualquier noticia que presente un noticiero) es que el miedo es la forma más eficaz de dominar a un pueblo entero: Todos encerraditos en sus casas y en sí mismos, eliminando lo más posible el contacto con el otro. Resaltando al diferente como un peligro potencial y haciendo que la población acepte y hasta pida a gritos que se eliminen libertades y derechos en pos de una supuesta "tranquilidad social". Lo vemos claramente en Estados Unidos donde el gobierno alienta con cada palabra o gesto a que la población viva aterrorizada porque no sabe cuando ni como el fantasmagórico "terrorismo internacional" va a golpear sus puertas profiriendo gritos guturales (es decir, en idioma árabe... el nuevo paradigma del mal) para violar mujeres o para rociar con ántrax toda la casa. Ahora los estadounidenses viven más vigilados y controlados que nunca... pero eso los hace sentir más tranquilos, aparentemente. Aceptan ser vejados y humillados en cada aeropuerto, filmados por miles de camaritas, cual ojo del hoy concreto "gran hermano", etc. Ni que hablar de los que tienen cierto tinte de piel, tipo sudamericano/árabe/hispano por ejemplo.

El año pasado (volviendo a la Argentina, y más concretamente a Buenos Aires) el número de delitos (desde asesinatos a robos comunes) había disminuído a uno de los niveles históricos más bajos... sin embargo, el bombardeo mediático era mayor e incesante con secuestros, robos, toma de rehenes y asesinatos. Es que tal vez suceda uno de éstos hechos en el día, pero con el método de anticipar las noticias que comentaba antes... en lugar de uno, parece que fueran al menos 15 diarios.

Por otro lado, ¿no es inseguridad el tema vial?. ¿No es inseguridad que mueran unas 8 mil personas al año en accidentes de tránsito? ¿Y alguien vio, participó, organizó o supo de alguna marcha con Blumberg a la cabeza y una vela en la mano pidiendo para que se ordene el tránsito en ciudades y rutas de una buena vez, para que se hagan los controles necesarios sin coima de por medio para hacer la vista gorda?¿Alguien escuchó a Patti o a Ruckauf prometiendo "mano dura" para terminar con las muertes en las rutas y calles del país?

¿No es inseguridad que se mantenga al hospital público, donde concurre la mayoría de la población a hacerse atender la salud, en un estado lamentable?

¿No es inseguridad que la economía que rige el destino de todo el país dependa de los caprichos o de la ambición de un grupete de "elegidos"? (siempre más o menos los mismos, claro)

¿De qué hablamos cuando hablamos de inseguridad?
¿Qué tipo de inseguridad nos venden y quieren meternos en la cabeza?
¿Qué se gana con meter miedo a la población?
¿Qué perdemos con el miedo?
¿Qué otras cosas no cuestionamos ni miramos por estar inmeros en miedos menores o no tan grandes y reales?
¿Quiénes y con qué métodos se ofrecen como la solución mágica a todos nuestros males devenidos por la inseguridad delincuencial?

En definitiva: ¿Qué quieren los que manejan los hilos de nuestro futuro que pensemos o que dejemos de pensar... que cuestionemos o que dejemos de cuestionar...?

Algo muy oscuro hay detrás de todo esto. Más escalofriante que el mismísimo "Jack, el destripador" que, según la tele, acecha en el umbral de nuestras propias casas a toda hora.