30.4.12

Repsol contra Argentina: accionistas contra ciudadanos

Por Juan Carlos Monedero (Licenciado en Ciencias Políticas y Sociología en la Universidad Complutense de Madrid)


En un momento de crisis económica y política inéditas en España desde hace décadas, el Partido Popular en el Gobierno, con menos herramientas de las que pensaba y con una agenda programática diferente de la prometida en las elecciones, recurre al manido y gastado recurso de agitar los vientos de la patria mancillada. El penúltimo recurso una vez que echar la culpa de todos los males a los anteriores gobernantes ya no resulta muy creíble ni entre los golpeados ciudadanos ni entre los insaciables mercados.

Una Argentina en crecimiento y con un Gobierno con voluntad de desarrollar políticas sociales decide asumir el control de uno de los elementos centrales de la soberanía de un país: los recursos energéticos. O, simplemente, decide buscar una opción más beneficiosa para la nación dentro de la lógica mercantil con la que opera el mercado mundial. O, igualmente, dentro del intercambio basado en el interés propio que marca el modelo capitalista –acentuado en su etapa neoliberal– decide reclamar a una gran empresa transnacional mayores inversiones, respeto medioambiental o un trato más ventajoso.

Estas pretensiones de lograr soberanía nacional se han zanjado en América Latina durante el siglo XX con golpes de Estado auspiciados precisamente por las grandes transnacionales y los países del Norte, que cobijan los saqueos de las empresas neocoloniales. Los mismos que hoy señalan a Argentina como un país “poco fiable”. Los mismos que señalaron como “sospechosos” a Allende o a Chávez. Con la diferencia de que hoy es más difícil tumbar gobiernos en América Latina. No porque no lo deseen, sino porque no pueden. El continente americano está aprendiendo a no dejarse abandonar. Y nunca la integración latinoamericana ha estado tan avanzada.

¿Es realmente la nacionalización de 51% de Repsol un problema entre España y Argentina? De la parte española es falso. Repsol es una compañía con apenas 20% de capital señalado como español. El resto corresponde a grandes corporaciones extranjeras. Y ese 20% se corresponde con grandes empresas: las mismas que desde diferentes instancias de España –fiscalía anticorrupción, por ejemplo– se señalan como las responsables del fraude fiscal. En otras palabras, que ni Repsol es española en su totalidad ni la parte que lo es beneficia a los españoles, ya que o no pagan apenas impuestos o tienen sus capitales en paraísos fiscales. Pese a la crisis y sus beneficios ¿creen ustedes que Repsol ha congelado el precio de la bombona de gas? ¿Y es esa la empresa a través de la cual se lastiman los intereses españoles?

Grandes empresas como Telefónica o Iberdrola –o la banca pública, cuyos capitales fueron prácticamente regalados a la banca privada (BBVA o el Banco Santander) pertenecían a todos los españoles. En ese contexto, la discusión sería entre la ciudadanía argentina y la ciudadanía española. Si ese fuera el caso, no estaríamos discutiendo. Resulta más complicado creer que pueden darse comportamientos depredadores entre gobiernos decentes. Ciudadanos democráticos no suelen pelear contra ciudadanos democráticos de otros países. ¿No recordamos que entre Petrobras y los intereses de Bolivia o Uruguay, Lula escogió los intereses de esos pueblos hermanos y no el interés de la compañía pública brasileña? Pero ese no es el caso ahora: se trata de accionistas de Repsol contra ciudadanos argentinos. Y la razón la tiene el gobierno de Cristina Fernández y su voluntad de defender a las argentinas y los argentinos. Por mucho que la derecha política y mediática española presente el asunto como un ataque a la patria.

 El Gobierno del PP está, pese a su mayoría absoluta, en un patético momento (igual que la monarquía. Igual que el PSOE). Detrás de su mayoría está solamente el voto de 3 de cada 10 votantes. Su éxito electoral se debió más a la retirada de los votantes del PSOE que a logros propios. La prima de riesgo –la diferencia de los intereses que se pagan por la deuda en comparación con lo que le cuesta financiarse a Alemania– se dispara sin cesar. Aprueban unos presupuestos muy restrictivos y a los cinco días anuncian 10 mil millones de euros más de recortes en sanidad y educación (demostrando caer en lo mismo que acusaron a Zapatero: improvisación). No hay prácticamente una promesa electoral que no hayan incumplido. El 15-M y los indignados crecen en rabia y voluntad de protesta. No pasaron 100 días y el PP perdió en las elecciones en Andalucía más de 400 mil votos. Un Gobierno vinculado directamente a la gran empresa –el ministro de Economía era el responsable de Lehman Brothers para Europa– no está pudiendo con tanta facilidad saquear el país para entregárselo a sus jefes. Y esa gente no perdona.

En tiempos de dificultades, los gobiernos con poca legitimidad siempre ondean las banderas patrioteras. No están en juego los intereses de España, sino los de los depredadores accionistas de Repsol. Si la gasolina o el gas que pagamos en España tuviera precios populares, manifestaciones en las calles clamarían por el regreso de la propiedad española de la empresa. Pero sólo gritan los testaferros de esa compañía. La ciudadanía anda preocupada con otras cosas. Como el orden global está construido por esos mismos sectores poderosos, la pelea de Repsol va a trasladarse, después del apoyo que brindarán los mismos gobiernos corporativos al Gobierno de España, a los órganos viciados que sostienen el capitalismo neoliberal: el Ciadi, el FMI, el Banco Mundial. El apoyo al Gobierno español del Gobierno corporativo norteamericano o de una Unión Europea volcada a vaciar el contenido social del continente no son sino señales de que hay dos modelos en pugna: el del continente latinoamericano, avanzando hacia sociedades integradas, con derechos sociales y un pueblo corresponsable, y el de Europa, donde se está debatiendo entre desmantelar el Estado social y empobrecer a las mayorías para enriquecer a las minorías –ahí entra también América Latina como objetivo–, o ganar un nuevo pulso ciudadano que ayude a salir de la locura neoliberal y caminar hacia un mundo donde mande la justicia global.

Fuente: Comiendo tierra
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28.4.12

Israel "engaña" sobre Irán...

El exjefe de los servicios secretos israelíes arremete contra Netanyahu y el ministro de Defensa, Ehud Barak

El ex jefe del Shin Beth, el servicio de seguridad interior israelí, Yuval Diskin, ha acusado al primer ministro, Benjamin Netanyahu, y al ministro de Defensa, Ehud Barak, de "engañar" a los israelíes sobre Irán.

Benjamin Netanyahu
"Mi principal problema es que no tengo fe en los actuales líderes, esos que deben conducirnos en un caso de guerra con Irán o de guerra regional", dijo Diskin ante un foro reducido de empresarios, intelectuales y activistas políticos de la ciudad de Kfar Saba, al noreste de Tel Aviv. "Engañan al país sobre el asunto de Irán. Afirman que si Israel actúa, Irán no se hará con la bomba nuclear. Es engañoso.
Numerosos expertos israelíes afirman que un ataque israelí acelerará la carrera nuclear de Irán", incidió. "No creo en un liderazgo que toma decisiones basadas en sentimientos mesiánicos", añadió.

Desde hace varios meses, Israel agita la amenaza de atacar las instalaciones nucleares iraníes. El Estado hebreo acusa a Irán de negociar únicamente para ganar tiempo, aunque Teherán asegura que su programa es únicamente civil.

Con una gran reputación en círculos de seguridad por haber frenado los atentados suicidas palestinos en las calles israelíes durante la segunda Intifada, Diskin, que fue jefe del servicio secreto interno israelí entre 2005 y 2011 -un cargo desde el que trabajó estrechamente con ambos políticos-, es el segundo ex alto mando que alza su voz contra un posible ataque israelí al programa nuclear iraní.

En marzo lo hizo el exjefe del servicio de espionaje Mosad Meir Dagán, que en una entrevista con la CBS advirtió de que ese ataque tendría consecuencias "devastadoras" para Israel y no pondría fin al programa nuclear iraní. Diskin también expresó su preocupación sobre el creciente racismo en el sociedad israelí hacía la minoría árabe y los extranjeros, y el hecho de que la sociedad israelí sea "cada vez más "beligerante". Por ello advirtió de un posible asesinato político por extremistas judíos como el que en 1995 sesgó la vida del primer ministro Isaac Rabin por negociar con los palestinos.

Fuente: Publico.es
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26.4.12

Y Péguele Fuerte... (Por Eduardo Aliverti)

No hay nada más imperioso, en momentos como éstos, que desmalezar la información circulante. Algunos colegas, sobre todo de este diario, vienen haciéndolo con rigor. Es tal el tráfico de intereses –y en consecuencia la cantidad de falsedades– que cabe insistir. El orden siguiente es aleatorio, tanto como el modo en que los sectores de derecha más concentrados revelan su desconsuelo. Para peor de esos grupos, el conjunto de la oposición apoya la medida. Hasta Macri tuvo que pegarle una vuelta a su virulenta crítica inicial desde la cuna de Antonia. Según les pinte, los medios militantes del antioficialismo ubican a uno u otro ítem como la amenaza grandilocuente. Suben y bajan. Parecen ascensor.  

- España hará tronar el escarmiento. El disparate más grande de todos. Las exportaciones españolas a la Argentina están en alrededor de mil millones de euros, pero las importaciones desde aquí son por el doble. Hay más de una docena de grandes empresas españolas que operan en la Argentina en rubros como banca, construcción, energía, hotelería, comunicación. Según el Ibex 35, índice de la Bolsa de Madrid, las compañías de la península se llevan más de 26 mil millones de dólares por ingresos generados en la Argentina. Solamente Telefónica obtuvo el año pasado un volumen de negocios superior a los cuatro mil millones de dólares. Santander Río, BBVA Banco Francés, Mapfre, DHL, Endesa, Cirsa, Santillana, NH Hoteles, Codorniú, Prosegur, y una lista que se completa con más de 400 empresas ibéricas operantes en la Argentina, dan cuenta de que España es hoy el primer inversor extranjero en nuestro país. A esa España que en cierto pero no menor sentido se cae a pedazos o, si se prefiere, al gobierno que la administra con el ajuste más salvaje de –por lo menos– su decurso post-franquista, no le dan los números siquiera para alzar la voz. Lo dijo, entre otros muchos ignorados por los medios españoles y sus aliados criollos, el cooperativista español Gabriel Trenzado: España tiene mucho más para perder que para ganar en un enfrentamiento con la Argentina.

 - También Europa podría vengarse. Es un aspecto que, si acaso pudiera ser posible, supera a la tontería del revanchismo meramente español. Así como, después de Brasil, Europa es el segundo destino de las exportaciones argentinas, la Unión Europea es el segundo inversor en la Argentina. Justo cuando la crisis de los europeos y sus empresas les hacen mirar con mayor cariño que nunca lo que puedan exprimir aquí y en el resto de América, para conformar a sus accionistas mientras descargan en las clases populares el costo del ajuste, Europa estaría en condiciones de demostrar lo larga que es su capacidad de intimidar. Muy gracioso.  

- La presión de Repsol por el monto indemnizatorio hará que acuda a todos los juzgados internacionales y la Argentina agregará porotos a su aislamiento del mundo. Reíte de Janeiro. La petrolera estatal venezolana y la Exxon estadounidense ya llevan cuatro años negociando el precio por las expropiaciones de Hugo Chávez. El dato es público. Tiene el plus de haber sido destacado, a entrada de columna a página 9, el jueves pasado, por uno de los periodistas serios que le quedan a Clarín, Daniel Fernández Canedo. Siempre se escapa algo.

 - Cuidado con el Ciadi, a donde podría recurrir el Estado español. El Ciadi es el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones. Una entidad y sigla más adecuadas a alguna ocurrencia de Groucho Marx que a un organismo altamente influyente. Depende del Banco Mundial, otro invento de los países ricos para distribuir migajas a cambio de planes de ajuste. De manera que su sentido es proteger a los grandes emporios radicados en las naciones en vías de desarrollo. Brasil no entró a ese engendro, como elemento informativo considerable si se estimara menor que huyeron de él Bolivia, Ecuador y Venezuela. Y si tampoco alcanzase eso para mensurar su nula o escasa influencia, tómese nota de que ninguno de sus temibles dictámenes perjudicó a país alguno. Si a Repsol se le ocurriese ir al Ciadi y de acuerdo con los antecedentes comprobados, se calcula que, entre el tiempo que llevará pasar por los tribunales argentinos y las apelaciones españolas, andaríamos más o menos por 2020.  

- Se afecta la seguridad jurídica de una empresa española, con todo lo que ello podría significar no sólo en términos de intercambio comercial sino también de relaciones institucionales, perjuicio para los españoles de a pie y, ergo, para la amistad entre los pueblos. Repsol es una multinacional, no una empresa española. Y respecto de las necesidades de la inmensa mayoría de los ibéricos, la voracidad y ganancias de la empresa tienen que ver con el pueblo español lo mismo que el culo con la llovizna. Leamos lo escrito por el colega Oriol Malló Vilaplana, en el sitio Público.es: “La llamada reconquista económica española de América latina, iniciada en 1991 con la privatización de grandes empresas públicas argentinas, supuso la irrupción de un nuevo grupo de poder en dicho territorio. Gracias a la cooptación, la corrupción y la seducción, el cartel español ha monopolizado mercados de obras públicas, agua, energía, turismo, medios y telecomunicaciones. La nueva elite neoliberal, formada al calor de Salinas de Gortari, Menem o Fujimori, tomó como bandera la democracia oligárquica española y su milagro económico, hoy en ruinas, mientras Felipe González piloteaba este proyecto de desembarco imperial bajo cobertura política y financiera de los Estados Unidos. Así emergieron, en los ’90, las poderosas redes de la hispanidad que son, hoy, el principal ariete contra el cambio y la soberanía de las Américas (...) El apoyo larvado al golpe de Estado empresarial contra Hugo Chávez en 2002, o la intervención directa en las elecciones mexicanas de 2006 para evitar el triunfo del candidato de centroizquierda Manuel López Obrador (demuestran que) el cartel español construye y reconstruye la historia jamás contada de los nuevos conquistadores, sus aliados locales y los verdaderos amos de la pinza Madrid-Miami”. En el mismo sitio, bajo título de “Por qué España agachará la cabeza con YPF”, David Bollero explica que “España por sí sola no podrá hacer nada. No tiene el peso internacional para hacer ello. Estamos hartos de comprobarlo y esta cuestión no será distinta. Por eso el gobierno busca desesperadamente apoyos externos, habiendo encontrado únicamente el de México. El resto son ambigüedades, puesto que la misma Unión Europea ya habla de conflicto bilateral y la Comisión Europea ha reconocido que ‘la UE no tiene actualmente ningún instrumento legal que invocar a este respecto frente a la Argentina’. Tan sólo podría ejercer presión, pero al borde del colapso del euro. ¿Le conviene? O, sencillamente, ¿se atreverá?”. Y termina: “Tras la actitud de gallito peleón, España terminará por agachar la cabeza en el asunto de YPF. Y, siendo honestos, es lo que nos toca. Queríamos capitalismo y nos han dado dos tazas. Nadie es rico si no es a costa de otro. Es una máxima que igual sirve para el ámbito doméstico como empresarial, o de relaciones internacionales. Y cuando las tornas se dan vuelta, escuece; pero hay que apechugar porque es el estadio original que nos corresponde. Todo lo demás, artificio”.

A esta altura de la nota, viene quedando afuera –sólo por ejemplo– observar o refutar que los Kirchner fueron noventísticamente decisivos para aprobar la privatización de YPF, o bien que se engulleron remarcar a su tiempo lo que ahora denuncian. ¿Es que siempre es tarde para hacer las cosas? ¿Es que siempre importa más de dónde se viene que hacia dónde se va, o que si es por eso jamás sería posible acometer una acción de gobierno sin que sea condenada? También queda afuera un Axel Kicillof que según los medios de la ultraoposición pareció estar más en una asamblea universitaria que frente a una comisión senatorial, como si nos hubiera ido mejor con los modositos que a lo largo de la historia respetaron la oratoria circunspecta. Y como si, al margen de apreciaciones retóricas, no hubiera tenido un desempeño que dejó sin argumentos a los interpelantes. Más todavía: queda afuera si se podrá demostrar que, además del acto épico de haber recuperado la más estratégica de las empresas, además de haberse animado a lo que ya no se soñaba ni con largas líneas de fiebre, sabrán sacar el petróleo y alterar el paradigma energético. Queda afuera de dónde saldrá la plata y qué intereses afectarán para que salga.

Puede, en principio, quedar afuera el desarrollo de todo eso; o remitirlo a algunas pocas oraciones como las precedentes. Pero ocurre que primero es imprescindible desmontar las pelotudeces, tilingas o corporativas, de que se vale el enemigo para asustar a la gente. Fuente: Pagina 12
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21.4.12

Rafael Correa rompió en Televisión Española el muro de censura sobre la esencia antidemocrática de los medios

"Vds. se creen propietarios de la opinión pública, y no, son propietarios de la opinión publicada. La opinión pública es la de nuestros pueblos” -le dijo el presidente de Ecuador a Ana Pastor- . La venganza vino en la manipulación de sus palabras irónicas sobre Human Right Watch. Una edición de Esther Jávega.
 


El pasado 19 de marzo, en una entrevista en Televisión Española, el presidente ecuatoriano Rafael Correa consiguió abordar uno de los temas blindados por la censura mediática: el de la naturaleza antidemocrática de los grandes medios de comunicación privados (1). “Ya bájense, derrumben esos mitos, esos estereotipos de los políticos malvados persiguiendo a pobres periodistas y pobres medios de comunicación. Es al revés. Esa gente, esos medios de comunicación, son los que han respaldado las dictaduras, los que han callado las represiones, los atracos bancarios, etc., y son los que persiguen a los gobiernos que queremos cambiar las cosas. Desmitifiquemos eso, por favor. (...) Por favor, no nos engañemos, entendamos lo que vive América Latina. De los 7 canales nacionales de televisión (en Ecuador) 5 pertenecían a la banca. ¿Vd. se imagina, si queríamos regular a la banca para que no ocurrieran los excesos que ocurrieron aquí en España y que nos han llevado a la crisis? Teníamos a todos los canales de televisión en contra. Hay conflicto de intereses. (...) Vds. se creen propietarios de la opinión pública, y no, Vd. son propietarios de la opinión publicada. La opinión pública es la de nuestros pueblos”.

Por vez primera, en muchos años, la audiencia de este canal público pudo escuchar una crítica al sistema global de medios de comunicación, y a su contradicción esencial. “Negocios privados dedicados a la comunicación social, dedicados a proveer un bien público fundamental para las sociedades. Es una contradicción de base. (...) Debe haber más medios públicos y más medios comunitarios que no tengan ese conflicto entre el lucro, el bolsillo, y la comunicación social”.

La directora y presentadora del programa “Los Desayunos de Televisión Española”, Ana Pastor, claramente incómoda ante las respuestas de Correa, asumió en la entrevista un papel de defensora del sistema mediático. Entrando varias veces en discusión con el entrevistado, la periodista le respondió que, en los medios, prima la profesionalidad por encima de los intereses económicos y políticos. “¿Vd. que cree que prevalece cuando un medio pertenece a la banca y tiene que criticar a la banca, qué va a prevalecer, el interés privado o el interés público?” –preguntó Correa-. “Pues, en algunos casos, incluso lo profesional” –respondió la presentadora-. “Nosotros tratamos de ejercer de intermediarios, presidente” –comentó en otro momento-. “Sí, pero a veces fracasan” –espetó Correa-. “Pero siempre, ya le digo, tratamos de hacerlo desde lo profesional” –se defendió Ana Pastor-.

También en defensa del establishment mediático, Ana Pastor -y la presentadora de la tertulia posterior- argumentaron la existencia de medios de referencia internacional, supuestamente serios y prestigiosos, una especie de jueces imparciales, como el diario New York Times, a pesar –recordemos- de su defensa de los intereses hegemónicos de EEUU en el mundo, y de haber jaleado invasiones militares como las de Irak, Afganistán o Libia (2). “¿Cómo entiende que The New York Times, en un editorial durísimo, hable de (que Vd.) lidera una despiadada campaña contra la libertad de expresión?” –preguntó la directora del programa. “De hecho, Ana Pastor –decía con perplejidad la conductora de la tertulia posterior- le estaba poniendo (a Correa) ejemplos de medios mundialmente serios, como el New York Times, y sin embargo (él) ponía en duda todos los argumentos que ahí salían...”

El presidente Rafael Correa también llevó a la audiencia opiniones sobre temas habitualmente proscritos de los grandes canales de información, como el poder del capital y la banca. “Podrán inyectar millones por aquí, millones por acá. El problema esencial es la supremacía total del capital sbre los seres humanos, y esto se refleja bastante bien en la cuestión de las hipotecas. (...) Una cosa es ser pobre porque no existan recursos suficientes, otra es ser pobre por sistemas perversos, excluyentes”.

E hizo una condena -también raramente escuchada en canales de televisión- de las pretensiones ilegítimas de hegemonía de las grandes potencias en América Latina. “Que no se traten los temas candentes, urgentes, intolerables en el siglo XXI -criticaba los foros como la Cumbres de las Américas-. Por ejemplo, el bloqueo a Cuba, que rompe todo el derecho interamericano y todo el derecho internacional. O, por ejemplo, la colonización de las Malvinas”.

La venganza contra el entrevistado vino inmediatamente después de acabar la entrevista. Un panel de 3 tertulianos de medios privados más la presentadora dedicaron todo el resto del programa a condenar –los 4, sin excepción- las palabras del presidente Correa. Una muestra de lo que hoy entiende por pluralidad de ideas un medio público de Europa. “Como es un político populista, se ve que los medios de comunicación le molestan mucho” –decía el periodista de “El País”-. “Me puse en el lugar de un periodista que trabaje ahora mismo en Ecuador y entendería que a partir de ahora tengan miedo a ejercer el derecho a la libertad de expresión” –apuntaba la representante de “El Mundo”-. “Tiene una visión demasiado censuradora del papel que cumplen los medios” –completaba el director de Radio Cable-. “A mí el discurso que hace, insisto, me parece peligroso” –completaba la periodista de “El Mundo”-.

Terminado el programa, no tardó en activarse la maquinaria de la manipulación, alrededor, principalmente, de las palabras críticas de Rafael Correa hacia la organización Human Right Watch, que la presentadora Ana Pastor trató de presentar como otro juez internacional imparcial y respetable. Correa hizo un interesante análisis, también insólito en un gran medio, sobre el sometimiento a intereses privados y el carácter antidemocrático de algunas ONGs. “¿Vd. sabe cómo se financia Human Right Watch? Éste es uno de los graves problemas de nuestros tiempos. Legitimamos organizaciones no gubernamentales sin ningún asidero democrático, satanizamos la política. Se quiere hacer política desde el sector privado en la parte económica, privado con fines de lucro, así como (también desde el sector privado) en la parte supuestamente sin fines de lucro. Es uno de los graves problemas de nuestro tiempo. Rescatemos la política”.

El presidente ecuatoriano habló entonces con ironía sobre la financiación de la citada ONG Human Right Watch. “¿Vd. sabe cómo se financia Human Right Watch? ¿Lo financian las Hermanitas de la Caridad, el cartel de Sinaloa?”

Pero este tono irónico de su respuesta, al parecer, no fue entendido por Ana Pastor quien, posteriormente, en su cuenta de Twitter, publicaba que Correa había afirmado que "a Human Rigth Watch lo financia el cartel de Sinaloa", recordemos, un grupo mafioso mexicano vinculado al tráfico de droga (3). Durante la propia emisión de la entrevista, que era grabada, el programa colocó incluso un título en pantalla con esa misma frase entrecomillada.

Días después, el canal público latinoamericano Telesur explicaba perfectamente lo ocurrido (4).

Pero la propia organización aludida, Human Right Watch, engordó la bola de la manipulación. Su director para las Américas, José Miguel Vivanco, declaraba a los medios que las palabras de Correa eran un “disparate irracional” y una muestra de su “intolerancia” a la crítica (5).

Otro elemento de ataque a Correa en los días posteriores a la entrevista fue un supuesto desprecio sexista del presidente ecuatoriano hacia la presentadora, por el empleo del diminutivo de su nombre (“Anita”), tratamiento cariñoso y de cercanía muy empleado en Latinoamérica con nombres tanto masculinos como femeninos (6).

Recordemos que la periodista Ana Pastor alcanzó una notable notoriedad tras su entrevista, en marzo de 2011, al presidente de Irán Mahmud Ahmadineyad. La caída del pañuelo que cubría su cabeza en plena entrevista fue narrada en los medios como un singular acto de heroísmo (7). Ana Pastor concedió entonces numerosas entrevistas, en las que demostró lo permeado que está su concepto del periodismo de una rancia prepotencia neocolonial. Así hablaba en el programa de Buenafuente (La Sexta TV) sobre el encuentro con el presidente iraní: “En eso consiste preparar una entrevista: en el tema que me preocupaba de los derechos humanos, que es algo que aquí, en Europa, nos preocupa, me había leído el informe del Parlamento Europeo sobre las ejecuciones. (...) He de reconocer que cuando pisas suelo del mundo libre, para una mujer, se agradece” (8).

La entrevista al presidente Rafael Correa consiguió, de manera absolutamente excepcional, que la audiencia de Televisión Española pudiera escuchar opiniones que son sistemáticamente censuradas en los grandes medios de comunicación, que jamás admiten análisis y críticas que apunten a su falta de legitimidad social y a su carácter antidemocrático, y que condena a que éstas no traspasen el limitado espacio de los medios alternativos.


(1) http://www.rtve.es/noticias/20120319/correa-son-medios-comunicacion-persiguen-politicos/508368.shtml
(2) http://www.lanacion.com.ar/1404213-el-ex-director-ejecutivo-del-new-york-times-se-arrepiente-de-haber-apoyado-la-invasion-a-ira
(3) https://twitter.com/#!/anapastor_tve/status/181665464974450689
(4) http://www.cubainformacion.tv/index.php/america-latina/106-america-latina/42310-lo-que-dijo-realmente-correa-sus-declaraciones-sobre-human-rights-watch-en-tve
(5) http://www.vanguardia.com.mx/hrwvedisparatadadeclaraciondecorreadequelesfinanciacartelsinaloa-1245044.html
(6) http://www.abc.es/20120320/medios-redes/abci-pastor-201203202253.html
(7) http://www.elmundo.es/elmundo/2011/03/15/comunicacion/1300181803.html
(8) http://www.youtube.com/watch?v=Pm0OlONrboQ



Fuente: Cubainformacion
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20.4.12

¿Por qué tanta histeria por Repsol/YPF...?

Si queremos saber qué es lo que el gobierno español de Mariano Rajoy pretende ocultar o minimizar usando a Repsol/YPF como una suerte de biombo, pues es esto que aparece en un sólo día del diario Público.es...
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19.4.12

2008/2012: Las dos caras de Rajoy...

 “Nuestro gas y nuestra energía no se pueden poner en manos de una empresa rusa porque eso nos convertiría en un país de quinta división", aseguraba cuando era opositor a Zapatero y la firma Lukoil pretendía ingresar a Repsol. Ahora, el presidente ibérico se resiste a la nacionalización argentina de YPF.


Muy pocos resisten a un archivo y el presidente de España no es uno de ellos. En plena ofensiva contra la Argentina por la nacionalización del 51 por ciento de YPF, salió a la luz un video en el que Rajoy se opone a la extranjerización de los hidrocarburos de España.




Las imágenes datan del 2008 cuando Rajoy era opositor al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y asumía la titularidad del Partido Popular (PP). "Nuestro petróleo, nuestro gas y nuestra energía no se pueden poner en manos de una empresa rusa porque eso nos convertiría en un país de quinta división", aseguraba ante la posibilidad que la firma Lukoil ingresara a Repsol.

"Por tanto no lo vamos a aceptar, que lo tenga claro el señor Rodríguez Zapatero", advertía Rajoy al entonces mandatario español.

Incluso, llegó a citar a su rival político del Partido Socialista Obrero Español cuando dijo: "No lo he hecho nunca en mi vida, nunca utilice a Felipe González como argumento de autoridad, pero en esto caso le pido a Zapatero que le haga caso a Felipe, que dijo que no se puede poner el petróleo y el gas en manos de los rusos".

Fuente: InfoNews
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16.4.12

De nuestra avanzada España hacia la retrasada América Latina (Por Pascual Serrano)

Hasta hace unos años, nuestros gobiernos europeos, nuestros medios de comunicación y nuestros economistas de pro contaban que los gobiernos de izquierda que estaban llegando a América Latina estaban haciendo peligrar la economía de aquel continente con su populismo e irresponsabilidad. El informe anual del BBVA, que diligentemente difundía El País en abril de 2008 en un artículo titulado “El BBVA y el riesgo venezolano”, advertía “sobre la situación venezolana en el capítulo de riesgos”. Seis meses después, los gobiernos estadounidense y europeos salvaban a la banca con fondos públicos mientras el gobierno venezolano concedía 236’7 millones de dólares para 1547 proyectos socioproductivos comunitarios.

Han pasado cuatro años y aquellos países que nos decían que estaban al borde del precipicio se han convertido en destino de los más cualificados jóvenes españoles, jóvenes titulados de máster y con conocimientos de idiomas que en España apenas pueden trabajar de teleoperadores y que a lo más que pueden aspirar es a ganar aquellos mil euros que hace unos años considerábamos una miseria y ahora un objetivo feliz.

Informa un reportaje de la revista Consumer (1) que nuestros ingenieros se van a Brasil, el tercer destino con más crecimiento (8,68% en el último año), un país que nos han presentado como un suburbio de favelas. El reportaje de la revista española insiste en aclarar que quienes “optan por abandonar España son en su mayoría jóvenes entre 25 y 35 años, sin responsabilidades familiares y con una elevada cualificación”. “Un estudio reciente afirma que Brasil necesita casi doblar el número de ingenieros en el país, hasta una cifra de 1,1 millones en 2020”, afirma. El gobierno Lula estableció el programa denominado Bolsa Familia que afecta nada menos que a trece millones de ellas y que supone el pago de un dinero a los sectores más pobres con la condición de que sus hijos estén vacunados y vayan al colegio. En mi última visita a Brasil, hasta la prensa opositora reconocía que, en contra de las críticas de la derecha, cada vez más familias se borraban del programa porque ya había mejorado su economía, disponían de trabajo y no cumplían las condiciones sociales para recibir la ayuda. No olvidemos que Brasil ha tenido una tasa media de aumento del PIB del 4% en los últimos años. Es curioso pero en España para las familias sin ingresos la “ayuda” que ha previsto el gobierno es la dación en pago, es decir, que se van a la calle si no pagan su hipoteca y ya no hace falta que le paguen más dinero al banco (2). Todo un privilegio. En Brasil también comprobé cómo los campesinos tienen garantizada la venta de sus productos al estado, el cual los utiliza para preparar la comida gratuita de los niños en los colegios. (3)

El país latinoamericano en el que residen más españoles mayores de 18 años es Argentina, seguido de Venezuela. Otros dos países estigmatizados por nuestros medios como víctimas de gobiernos populistas con ideas económicas trasnochadas. Argentina ha anunciado nuevas políticas inmigratorias debido a un incremento en las consultas de españoles en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Ya en diciembre de 2010 se contabilizan en unos 1.200 los jóvenes de entre 25 y 35 años que cada mes emigraban desde España a buscar trabajo en Argentina (4). A pesar de todo ello, nuestra prensa sigue instalada en su soberbia y, el pasado 10 de marzo, El País titulaba “Argentina se aprieta el cinturón” (5), debido a que se prevé que termine el crecimiento del 7% que había tenido hasta ahora y se quede en el 4%. Imaginemos entonces cómo está nuestro cinturón si The Economist prevé que la economía española caiga un 1,4% este año y registre un crecimiento nulo en 2013 con una tasa de paro prevista del 23,3% para este año (6). De hecho, por apretarse el cinturón, el diario entiende que los argentinos verán que el estado les rebajará “los subsidios que permiten a millones de argentinos disfrutar de la luz, el agua y el gas a precios de risa”. En España el estado no nos baja ningún subsidio, nos sube el IVA de la electricidad al 18%. Otra diferencia entre los gobiernos “populistas” de la retrasada Latinoamérica y nuestra moderna y dinámica España.

En cuanto al segundo país latinoamericano como destino de nuestros jóvenes emigrantes, Venezuela, también podemos hacer comparaciones. Mientras que en España durante el pasado año se producían una media de 300 desahucios al día, es decir, familias que eran echadas de su vivienda por no poder pagar la hipoteca al banco, en Venezuela el estado entregó 146.022 viviendas, y para 2012 el objetivo es entregar otras doscientas mil (7). Presidentes como el ecuatoriano Rafael Correa, han expresado mucha más preocupación por la situación de los desalojados de su vivienda en España debido a la explosión de la burbuja inmobiliaria -muchos de ellos emigrantes ecuatorianos- que el propio gobierno español. De hecho hizo esas declaraciones denunciando que todo el peso de la crisis caía sobre la familias en lugar de sobre los bancos, en una rueda conjunta con Mariano Rajoy en Madrid el pasado 17 de marzo, en la que el presidente español no hizo la mínima mención al problema de esas familias que se quedan sin techo (8).

Otra diferencia curiosa entre España y esos países tan despreciados por nuestro establishment económico es la edad de jubilación. Mientras se aumentaba en España a los 67 años, Bolivia promulgaba en enero de 2011 una ley que la rebajaba de 65 a 58 años. Eso se pudo hacer porque se nacionalizaron los planes de jubilación que hasta entonces los gestionaban empresas financieras extranjeras, muchas de ellas españolas. En Argentina las mujeres se jubilan a los sesenta y en Venezuela a los cincuenta y cinco, mientras que los hombres a los sesenta (9).

Un último detalle. Más de 15.000 españoles han elegido Cuba en busca de una oportunidad profesional (10). ¿Recuerdan aquella famosa crisis de los balseros en Cuba allá por 1994? Salieron 14.727 cubanos en busca de una oportunidad de trabajo en Estados Unidos, menos que españoles se han ido ahora a Cuba a lo mismo.

Referencias:

(1) Astorell, Carlos. “Encontrar trabajo fuera de España”. Consumer, 12-3-2012
http://www.consumer.es/web/es/economia_domestica/trabajo/2012/03/12/207705.php

(2) Efe. “El Gobierno permitirá la dación en pago a familias sin ingresos”, 22-22012
http://www.lne.es/economia/2012/02/22/gobierno-permitira-dacion-pago-familias-ingresos/1202890.html

(3) Serrano, Pascual. “Una cooperativa de los Sin Tierra”. Le Monde Diplomatique, febrero 2012

(4) Delicado, Ana. “La crisis envía a miles de jóvenes a Argentina”, Público, 13-12-2010
http://www.publico.es/espana/351397/la-crisis-envia-a-miles-de-jovenes-a-argentina

(5) Peregil, Franciso. “Argentina se aprieta el cinturón”, El País, 10-3-2010
http://internacional.elpais.com/internacional/2012/03/10/actualidad/1331412480_576256.html

(6) Europa Press. “España caerá un 1,4% este año y registrará crecimiento nulo en 2013”. 18-3-2012
http://www.europapress.es/economia/noticia-espana-caera-14-ano-registrara-crecimiento-nulo-2013-20120318123602.html

(7) Agencia Venezolana de Noticias, 15-3-2012 http://www.avn.info.ve/node/103593

(8) “Correa plantea a Rajoy la insuficiencia del código ético para la banca”. El País, 17-3-2012
http://politica.elpais.com/politica/2012/03/17/actualidad/1332018305_049836.html

(9) Ver http://www.vicepresidencia.gob.ve/info_jubilaciones.php

(10) Astorell, Carlos. “Encontrar trabajo fuera de España”. Consumer, 12-3-2012
http://www.consumer.es/web/es/economia_domestica/trabajo/2012/03/12/207705.php

Fuente: Pascual Serrano
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15.4.12

La ruta de la heroína (y la responsabilidad de EEUU y la OTAN)

Rusia prohíbe a la OTAN de transportar heroína a través de su territorio
(Más video que muestra a soldados de EEUU protegiendo y ayudando en los cultivos de amapola y opio en Afganistán)


Durante la cumbre de la OTAN en Bucarest en el año 2008, el presidente ruso Dimitri Medvedev, se había ofrecido a poner a disposición de la Alianza Atlántica las líneas ferroviarias rusas para asegurar el transporte desde o hacia Europa de material no letal proveniente de Afganistán.

El 05 de abril de 2012, Alexander Grushko, vice ministro de Relaciones Exteriores ruso que se espera que se convertirá pronto en el próximo Representante Permanente de Rusia ante la OTAN, dijo en una entrevista con la agencia de noticias RIA Novosti, que el transporte [carga] que se le había otorgado a la OTAN en el pasado [por las vías férreas] ahora se regirá por una nuevo Protocolo. En virtud de este nuevo acuerdo, la carga o flete de la OTAN será revisado por los servicios rusos de lucha contra el narcotráfico.

El consumo de heroína afgana se ha convertido en el principal problema de salud pública en Europa en general y en Rusia en particular. El país se ha convirtido en el mayor consumidor del mundo. Hasta la fecha, dos millones de jóvenes rusos de edad entre 18 y 39 años son consumidores habituales. Esta droga provoca más de 30,000 muertes al año y promueve la propagación del virus del SIDA [VIH] a un ritmo nunca antes visto en un informe de la ONUDC. [1]






Ver video: soldados de EEUU ayudan y protegen los campos de cultivo de amapola y opio para la fabricación de heroína.

Los responsables de la lucha anti-drogas en Rusia abordaron el tema hace un tiempo atrás de manera explícita señalando ya en ese momento el papel de la OTAN en el tráfico [y aumento] de heroína desde [o proveniente] de Afganistán. Las autoridades rusas incluso han llevado el asunto ante el Consejo de Seguridad de la ONU.[2]

El anuncio de Alexander Grushko y su nombramiento como Representante Permanente de Rusia ante la OTAN marca el regreso de Vladimir Putin. Este último considera que su país es el objetivo de un verdadero "plan de agresión con heroína", y ha hecho de la lucha contra este flagelo una prioridad nacional en lo que respecta a su nuevo mandato presidencial.

En la época de la firma del primer convenio ferroviario Rusia-OTAN, los responsables del partido de Putin habían indicado fuera del alcance de los micrófonos, que a cambio de esta ayuda ferroviaria hecha a la OTAN en territorio ruso, Medvedev recibió un soborno de mil millones de dólares al año, dinero financiado con el tráfico de las drogas afganas.[3]

Referencias:

[1] «La UNODC revela las consecuencias devastadoras del opio afgano», por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Crimen, octubre de 2009.
[3] «El opio, la CIA y la administración Karzai», por Peter Dale Scott, Red Voltaire, 27 de décembre de 2010.

Fuente: Red Voltaire
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Repsol-YPF: depredación y contrastes

Editorial de La Jornada, de México...



En días recientes, el diferendo entre la petrolera Repsol-YPF y el gobierno de Argentina ha crecido hasta adquirir tonos de conflicto internacional. El pasado jueves, el ministro español de Industria, José Manuel Soria, afirmó que cualquier gesto de hostilidad contra empresas de su país sería interpretado como un gesto hacia España y traería consecuencias. Ayer, el canciller español, José Manuel García-Margallo, pidió al gobierno de México –en su calidad de presidente pro témpore del G-20– que ayude a la petrolera trasnacional ante la perspectiva de una posible nacionalización por el régimen de Buenos Aires, llamado que es imposible desvincular del interés económico de las autoridades de nuestro país en la firma española, redimensionado tras la reciente adquisición –con dinero público y con resultados desastrosos para México— de casi un 5 por ciento de sus acciones por Petróleos Mexicanos.
Es importante subrayar que la referida confrontación entre la petrolera trasnacional y el gobierno argentino no se debe a una actitud hostil del segundo hacia la primera, ni mucho menos a un capricho de la administración que encabeza Cristina Fernández de Kirchner, sino, fundamentalmente, al incumplimiento por Repsol-YPF –que controlan 37 por ciento de las reservas petroleras de la nación sudamericana y 55 por ciento del mercado de combustible– de sus compromisos de inversión en la industria petrolera argentina, lo cual afecta las necesidades y la soberanía energéticas de ese país.

El telón de fondo ineludible es el historial de saqueo y de afectaciones que ha protagonizado la empresa petrolera española a las poblaciones y a los patrimonios de naciones como Argentina y México. En el país sudamericano, dicho historial puede rastrarse desde el propio proceso de privatización de YPF bajo el gobierno de Carlos Menem: éste, tras haber asumido la deuda de la empresa petrolera y haber despedido a casi 35 mil de sus trabajadores, remató YPF en una operación irregular y a un precio muy por debajo de su valor. Para colmo, en los casi tres lustros transcurridos desde la venta de YPF a Repsol, el comportamiento de ésta ha distado mucho de ser benéfico para los argentinos: por el contrario, se ha caracterizado por una disminución de las reservas petroleras del país sudamericano, por una maximización de las ganancias por concepto de exportación, por un reparto de la mayor porción de las utilidades entre los accionistas de la petrolera y, en consecuencia, por un aporte ínfimo al desarrollo de la industria argentina de los hidrocarburos, en lo que constituye un claro ejemplo de neocolonialismo económico.

Por lo que hace a nuestro país, los preceptos constitucionales que reservan al Estado la potestad exclusiva sobre actividades del ramo energético no han impedido que Repsol se haga de jugosas oportunidades de negocio en el sector: así ha ocurrido, por ejemplo, con la venta, por parte de la petrolera española, de gas importado de Perú a la Comisión Federal de Electricidad –a un precio muy por encima de su valor real–, y con la proliferación de los permisos para productores independientes de electricidad, que actualmente generan 55 por ciento del flujo eléctrico que se consume en el país y entre los que Repsol detenta una posición privilegiada.

Así pues, la trayectoria de Repsol tanto en Argentina como en México es emblemática de la depredación y la rapiña corporativa que ha prevalecido en la región a partir de la oleada de privatizaciones y de la apertura indiscriminada de las economías a capitales extranjeros –mineras, petroleras, generadoras de electricidad, instituciones financieras, entre otras–: tales procesos, impuestos en nuestros países por gobiernos neoliberales como los de Menem y Carlos Salinas de Gortari, se han saldado con el incumplimiento impune de las leyes y normas nacionales por las empresas, con la obtención de cuantiosas ganancias económicas a cambio de mínimas aportaciones a las economías nacionales, con depredación financiera y ecológica y con afectaciones a la vida cotidiana de la población.

Resulta desolador que mientras Argentina busca recuperar la soberanía sobre sus recursos naturales y sobre un sector estratégico de su economía, como el petrolero, el gobierno calderonista se empeñe, en un afán inexplicable por beneficiar a Repsol a costa de lo que sea, en un rumbo de acción que no sólo ha creado graves problemas internos, sino ha causado, por distintos frentes, un grave quebranto monetario al erario.

Si Calderón cede a las presiones del gobierno de Mariano Rajoy, provocará un deterioro de la relación bilateral con Argentina y del proceso de integración latinoamericano en general, afectado de por sí por la decisión de las administraciones panistas de marginar a México en la región. Lo pertinente, en suma, es aprender de los ejemplos procedentes de Sudamérica, lo cual, en este caso, implica poner un alto a la política de entrega de los recursos naturales nacionales a los depredadores de la escena internacional.
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14.4.12

Regurgitaciones colonialistas. España, ¿cuál España? (Por Atilio Borón)

El entredicho entre el gobierno argentino y la empresa Repsol-YPF ha desencadenado una virulenta reacción de parte de funcionarios del gobierno ultraconservador español. Las declaraciones del Ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; de la Vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría y la del Secretario de Estado de España para la Unión Europea, Iñigo Méndez de Vigo, revelan que a pesar del largo tiempo transcurrido estos funcionarios de la Corona todavía no se percataron del resultado de la batalla de Ayacucho que, en 1824, terminó de demoler los restos del imperio español en esta parte del mundo. Tanto su “puesta en escena” –rostros endurecidos de furia, frases altisonantes, dedo índice en ristre de García-Margallo- como el contenido amenazante de sus declaraciones, especialmente la del tal Méndez de Vigo diciendo que la Argentina se convertiría en un “apestado internacional” y sufriría “consecuencias malísimas” en caso de que se afectaran los intereses de Repsol-YPF son un oportuno recordatorio de que, lamentablemente, las peores tradiciones del colonialismo español siguen vivas y regurgitan cada vez que sienten que alguna de sus antiguas colonias se aparta del curso de acción fijado por la antigua metrópolis.

La violencia simbólica desatada en estos días se inscribe en el sórdido panorama que presenta la España actual, atribulada por una profunda crisis económica y por el fenomenal retroceso experimentado en materia de derechos ciudadanos y libertades públicas. Hace apenas un par de días que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, hizo pública su intención de vigilar y maniatar las redes sociales por lo que toda convocatoria a protestas o manifestaciones políticas de cualquier tipo hecha a través de las mismas será tipificada nada menos que como un delito penal. A partir de esa iniciativa, el gobierno español podrá perseguir a quienes, en su peligroso delirio, califica como “grupos radicales antisistema” involucrados en novísimas formas de “guerrilla urbana”. Todo esto con el afán de impedir que las víctimas del brutal ajuste neoliberal impulsado por el Partido Popular puedan oponer resistencia y luchar contra la injusticia de un proyecto al que sola y exclusivamente le preocupa salvaguardar los intereses del capital, no el bienestar del pueblo. Pese a ello son muchos quienes con ingenuidad todavía confunden un régimen capaz de producir estas muestras de despotismo con la “democracia.”

El argumento más socorrido por estos enardecidos funcionarios de la Corona es que cualquier agresión a Repsol-YPF sería un ataque a España y, por ende, a los españoles. No hay que caer en esa trampa. El pleito no es con España o los españoles sino con su burguesía, que explota y desangra a los pueblos tanto fuera como dentro de España, cosa que hoy es evidente hasta para un ciego. Porque España no es esa pandilla de saqueadores profesionales, dignos descendientes de quienes cometieron en nuestras tierras el mayor genocidio de la historia, amparados por la maléfica alianza entre la cruz y la espada. España no son esos especialistas en vaciar empresas y en arrancar pingües ganancias como lo han hecho por toda Latinoamérica y el Caribe bajo la protección de sus padrinos políticos, sean estos Felipe González, José María Aznar o Mariano Rajoy. España no es esa Corona nauseabunda y parasitaria, hundida en una ciénaga de escándalos que “la prensa seria” de la península se encarga de disimular. Para nosotros España es la poesía de Miguel Hernández, Rafael Alberti y Federico García Lorca; las pinturas de Pablo Picasso; la música de Manuel de Falla y Pablo Casals; la filosofía de Manuel Sacristán Luzón, y de mi inolvidable maestro Adolfo Sánzhez Vázquez. España es la extraordinaria labor de los republicanos exiliados en México: Wenceslao Roces, José Gaos y Eugenio Imaz, entre otros, eximios traductores al castellano de El Capital y otros textos de Karl Marx, así como de muchos otros autores del pensamiento clásico. España, por último, es el indoblegable heroísmo de la Pasionaria y los anarquistas y comunistas que lucharon contra la barbarie franquista, de la cual Rajoy, Aznar y el Partido Popular son sus indiscutibles herederos. Estos energúmenos, tardíos sobrevivientes de un conjuro medieval, representan con sus exabruptos de hoy lo peor de España. Son los perros guardianes de los filibusteros de traje y corbata que siembran miseria dentro y fuera de España. La lucha es contra esa España, no contra los españoles ni mucho menos contra la otra España, con la cual nos sentimos hermanados.


Fuente: Atilio Borón
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¿Qué quiere Obama? (Por Atilio Borón)

¿Por qué Barack Obama querría reunirse con la Presidenta Cristina Fernández? Sobran las conjeturas, pero las escasas –y además crípticas- declaraciones procedentes de Washington remiten a una agenda conteniendo temas tales como la supuesta presencia de grupos terroristas iraníes operando en América Latina y particularmente en la Argentina y la excesiva labilidad de la legislación nacional en relación al lavado de dinero, lo que habría originado el bloqueo estadounidense a créditos otorgados por el BID y el Banco Mundial. En realidad, estos asuntos carecen de sustancia: lo de los iraníes es en parte la clásica paranoia de Washington y en parte una táctica para presionar a nuestros países y para aislar, satanizándolo, a Irán. Lo del lavado de dinero es otra acusación que carece de fundamento, sobre todo cuando quien la esgrime tiene a unos cien kilómetros de la Casa Blanca a uno de los paraísos fiscales más importantes del mundo: el Estado de Delaware, que publicita por todos los medios que cualquier compañía que instale allí su casa matriz, aunque sea una diminuta oficina, estará eximida del pago de impuestos por todos los ingresos producidos por sus subsidiarias que desarrollen sus actividades fuera de los pequeños límites de este estado, sea dentro de los Estados Unidos o en el exterior. Por eso un sesenta por ciento de las 500 mayores transnacionales listadas en la revista Fortune tienen sus oficinas centrales en ese estado, que además se vanagloria de tener una legislación que “no pone límites a la usura”.
Dados estos antecedentes y teniendo siempre en cuenta que jamás se puede confiar en la mentirosa benevolencia del imperialismo y sus voceros (el que tenga dudas mejor que medite sobre lo ocurrido con Gadafi), la hipótesis que se perfila con más fuerza para comprender el sentido de la invitación de Obama diría que está motivada por el deseo de sabotear, por ahora diplomáticamente, el proyecto integracionista representado por la UNASUR y aislar a los gobiernos de izquierda de la región, principalmente a la Venezuela de Chávez. El Acuerdo del Pacífico, activamente promovido por Estados Unidos y secundado por el México ultraconservador de Felipe Calderón y, en Sudamérica, por Colombia, Chile y Perú, equivale a introducir el Caballo de Troya dentro de la UNASUR. No es casual que la inesperada solicitud para reunirse durante la Cumbre del G-20 en Cannes haya llegado poco después que la Presidenta pronunciara dos discursos enfáticamente ‘unasurianos’ el domingo por la noche luego de su rotunda victoria electoral. La enfermiza obsesión de Washington es acabar con el experimento bolivariano y apoderarse del petróleo de Venezuela, como ya lo hizo con el de Irak y Libia. Para los halcones norteamericanos -de los cuales Obama es su solícito mayordomo- la estrecha relación consolidada a lo largo de estos años entre la Argentina y Venezuela es un molesto obstáculo que debe ser removido cuanto antes. La estrategia para el 2012, año en que se celebrará la crucial elección presidencial en Venezuela, es llegar a ese momento con un Chávez debilitado por una intensa campaña desestabilizadora –¡que ya ha comenzado!- que incluye desabastecimientos selectivos de artículos de primera necesidad, asesinatos al voleo hecho por paramilitares colombianos infiltrados ilegalmente en el país o lúmpenes reclutados para instalar una sensación de absoluta inseguridad ciudadana, y la permanente gritería de la “prensa independiente” (en realidad, la única instancia organizativa que tiene la derecha habida cuenta de la debilidad de sus expresiones partidarias) denunciando supuestas restricciones a la libertad de prensa en un país en donde desde un periódico, una radio o una televisora se puede hacer la apología del magnicidio o incitar a la violencia con total impunidad. Dentro de esta estrategia global, apartar a la Argentina del proyecto integracionista sudamericano es un paso táctico de la mayor importancia. Avanzar hacia ese objetivo parecería ser el único sentido posible de la invitación hecha por el mandatario norteamericano.


Fuente: Atilio Borón
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6.4.12

"A estas alturas no sé realmente lo que es la democracia"



En un reportaje aparecido en el diario El País de España, con motivo de su presentación en el Festival de Teatro de Bogotá de la obra "1984", de George Orwell, el actor y director Tim Robbins dejó algunos conceptos interesantes. Tal vez para muchos no sean tan originales, pero aún en ese caso, también es importante refrescarlos.También debo aclarar que según mi punto de vista, hay un punto en el que no concuerdo totalmente pues generaliza respecto a los gobiernos y realidades de Latinoamérica. Pero recordemos que a pesar de la lucidez que muestra, no deja de tener algún sesgo propio de quien nos mira desde los Estados Unidos.


The Actor's Gang, el grupo teatral que dirige el actor Tim Robbins debutó anoche en el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá con su versión del clásico de George Orwell 1984. Una representación densa, correosa y dura basada fundamentalmente en el poder de los actores, sin ninguna concesión a los juegos escénicos y las distracciones. Hay en esta obra un mensaje político y social que Robbins cree que "evoluciona con el tiempo". La estrenó en 2006 en Los Ángeles, cuando todavía George W. Bush era presidente del Gobierno de su país, pero dice que la vigencia del texto crece día a día. En 2009 la representó en España, (en Madrid, Barcelona y Vitoria), momento del que guarda muy grato recuerdo. El día siguiente de la liberación por parte de las FARC de 10 militares y policías secuestrados durante más de 14 años, su puesta en escena en Bogotá cobra una actualidad un tanto inquietante.

Pregunta. ¿Tan vigente cree que sigue esta obra de Orwell escrita en 1949?

Respuesta. En Barcelona la representamos en el mismo teatro en las Ramblas donde George Orwell, desde una torre del edificio, combatió al fascismo de Franco con un fusil en la mano. Él fue brigadista internacional en la Guerra Civil Española y escribió una obra en la que habla de luchar contra cualquier tipo de opresión venga de donde venga. Después de nuestra gira por España nos dimos cuenta de que el público la acogió de una forma muy enérgica. Todo el mundo sabía lo que significa vivir bajo la opresión y la dictadura. Eso hizo que el público español se enfrentara a mi propuesta de una forma muy visceral y emocionante.

P. ¿Pero no cree que las cosas han cambiado de 1949 hasta aquí?

R. La situación actual es casi peor que la que describe Orwell en su libro. La gente hoy en día, por ejemplo, ha optado por renunciar a su privacidad. Todos vamos con un aparato de localización encima a todas horas. (Lo dice enseñando su teléfono móvil). Nosotros mismos le permitimos al Gran Hermano tener el poder. Cada vez que no dices o haces algo porque crees que puedes tener problemas por hacerlo, le estamos dando el poder. El poder, el control se consigue con intimidación y miedo. Y uno de los lugares por los que recibes ese mensaje de odio e intimidación es la tele. Constantemente estamos recibiendo mensajes para vivir en el odio.

P. ¿Las cosas ahora están peor?

R. El texto de Orwell es mucho más relevante ahora que cuando fue escrito. Uno de sus capítulos titulado La guerra es paz habla perfectamente de la situación actual. Es cierto que existen totalitarismos en los que no hay libertad. Pero en algunas democracias, casi todas, los ciudadanos eligen y votan a personas que tienen relaciones o intereses en corporaciones. Así ocurrió en Estados Unidos con George W. Bush. Y cuando un gobernante intuye que puede perder el poder siempre va a intentar mantenerse en el sillón. Es ahí donde entra la propaganda.

P. ¿Ha empezado a dejar de creer en la democracia?

R. A estas alturas, no sé lo que es la democracia realmente. Sé lo que es el ideal de democracia. Pero, ¿se puede pensar en estos momentos en un solo país en el que realmente sea la voluntad de la gente la que gobierne? ¿Se puede pensar en algún gobierno democrático que realmente esté legislando para terminar con las diferencias entre ricos y desfavorecidos?... No estoy seguro. Me gustaría que los que tienen el poder encontrasen el límite entre lo que se puede hacer y lo que no. Para mi un límite claro está en la censura y la opresión. Un límite claro está en encarcelar a gente que no opina como el poder quiere que piense. En Latinoamérica es algo que ocurre generalizadamente. Y me da igual que quien esté en el poder sea de izquierdas o de derechas. No creo que pudiera manifestar mi apoyo a ninguno de esos gobiernos aunque se digan democráticos.

P. ¿Qué otros efectos drásticos ha tenido la obra de Orwell en usted en estos seis años en que lleva representándola?

R. He hecho un experimento desde los últimos tres años. Me deshice de mi televisor. Ya no veo la tele. En la obra hay algo que los ciudadanos han de hacer delante de sus pantallas: mantener sus dos minutos de odio. Yo me descubrí teniendo mis dos horas de odio contra Bush frente a mi televisor todos los días y decidí que tenía que dejar de odiar. Me di cuenta de que fueras de la opción política que fueras, te sentabas delante del televisor a odiar. Y el odio genera división y mientras estemos divididos los que gobiernan serán más fuertes. Ellos fomentan la división porque saben que esa situación juega a su favor. Se mantendrán en el poder mientras los ciudadanos estemos divididos. Así que rechazo mis dos minutos de odio, rechazo la idea de odiar a nadie.

P. ¿Entonces cree que vivimos en un sistema basado fundamentalmente en el odio?

R. El negocio de dividir a la gente es algo muy cínico y cruel. En el momento en que uno dice estar en contra de un totalitarismo fascista, por ejemplo, pasa a ser calificado inmediatamente como comunista, radical de izquierdas... Y por supuesto no puede haber nada más alejado de la verdad. Se trata de mantener a la gente dividida y hay auténticos profesionales a sueldo de los gobiernos especializados en mantener esa división. Yo estoy en contra de cualquier forma de opresión venga de donde venga.

P. Estando en Colombia, ¿cómo valora el hecho de que las FARC hayan puesto en libertad a 10 secuestrados y hayan comunicado su intención de abandonar totalmente el secuestro que ellos llaman de extorsión por dinero?

R. No conozco muy bien el caso. No sé muy bien quiénes son las FARC ni lo que piden ni dónde se sitúan políticamente. Pero, en 1984 el rebelde es Goldstein y ejerce una función en esa sociedad. Nunca lo eliminan. Es una amenaza constante. ¿Qué función cumplen los grupos guerrilleros? ¿Son realmente un mecanismo para mantener a cierta parte de la población alerta y encabronada? ¿La actuación de cualquier grupo terrorista cumple la función de enfurecer a cierta parte de la población con el único propósito de legitimar determinadas actuaciones de los Gobiernos? No lo sé. Solamente dejo esas cuestiones en el aire. En 1984 se habla de una guerra que nunca termina y que siempre está a punto de terminar y el protagonista llega a poner en duda que esa guerra no sea otra cosa que una invención propagandística mantenida por los que están en el poder.

P. Parece que su visión del mundo no es muy optimista que digamos, ¿No?

R. No. En absoluto. Soy muy optimista. El movimiento Occupy Wall Street está cumpliendo una función de esperanza absoluta en el mundo. Comenzó con la Primavera Árabe y las protestas en España con el movimiento 15-M. Han conseguido ser el punto crítico real de muchas perversiones de occidente. Es algo que era inimaginable hace 20 años. Internet está logrando que caigan barreras culturales y físicas entre sociedades de todo el mundo. Está creando una democracia real en una comunidad mundial unida que se queja y quiere luchar contra los mismos abusos que sufren en sus vidas diarias. Por primera vez, nos estamos dando cuenta del poder real que tiene la unión de gente organizada para protestar. Un gran poder que no ha hecho más que comenzar. La gente tiene dentro de sí el sentido de rechazo contra lo injusto y soy optimista. Quiero ser optimista en esa unión por el cambio real.

P. ¿En serio cree que los movimientos de indignados de todo el mundo pueden ganar la batalla?

R. Creo que ese grupo de gente organizada para hacer preguntas y exigir respuestas es un síntoma de salud impresionante en una sociedad democrática. Es algo que tiene que ocurrir y si no ocurre es que algo está mal. Pero, ¿cuál es la definición de ganar? Realmente ya lo han hecho. Han logrado cambiar el foco. Ahora en Estados Unidos todos los medios de comunicación saben qué es eso del 99 por ciento y hablan de ello, de las tremendas desigualdades sociales que ha generado el sistema tal y como lo conocemos. Los indignados han logrado cambiar la discusión. Ahora lo importante es la enorme distancia que separa a los ricos de los pobres y que un gran país no debería soportar bajo ningún concepto. Más y más gente ha tomado conciencia de ello y se lo debemos a los indignados. Tal vez no se hayan solucionado problemas. Pero el cambio de mentalidad del ciudadano en general está llegando a ser muy importante. Tanto que, estoy seguro, terminará por tener su reflejo.

Entrevistado por Manuel Cuéllar Del Río
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2.4.12

La guerra de la triple alianza contra un Estado soberano (Por James Petras)

Mientras que la maquinaria mediática del dispositivo occidental para la guerra en Siria conforma su versión de los sucesos a la propaganda de la OTAN, la realidad documentada de los hechos sobre el terreno es muy diferente. Para el profesor norteamericano James Petras, no se trata de una guerra civil sino de un ataque coordinado llevado a cabo por una coalición internacional. El gobierno sirio no reprime a manifestantes pacíficos sino combate a grupos armados de mercenarios de Al-Qaida.

Algunas de las armas abandonadas por los mercenarios de Al-Qaida durante la liberación del barrio de Baba-Amro a Homs, Siria.

Existen pruebas claras y contundentes de que el levantamiento para derrocar al presidente al-Assad de Siria es un violento robo de poder dirigido por combatientes apoyados desde el exterior que han matado y herido a miles de soldados, policías y civiles sirios, a partidarios del gobierno y de su oposición pacífica.

La indignación expresada por los políticos de Occidente y de los Estados del Golfo y en los medios de comunicación sobre el asesinato de pacíficos ciudadanos sirios que protestaban por la injusticia está cínicamente planificada para encubrir los informes documentados de la toma violenta de barrios, pueblos y ciudades a manos de bandas armadas que blanden ametralladoras y colocan bombas en las márgenes de los caminos.

La agresión a Siria está respaldada por fondos, armas y formación extranjeros. Sin embargo, debido a la falta de apoyo interno, y para tener éxito, será necesaria la intervención militar extranjera directa. Por esa razón se ha montado una enorme campaña de propaganda y diplomática con el fin de demonizar al legítimo gobierno sirio. El objetivo es imponer un régimen títere y reforzar el control imperial occidental en Oriente Próximo. A corto plazo, ello aislará aún más a Irán en la preparación para un ataque militar de Israel y de Estados Unidos y a la larga, eliminará otro régimen laico independiente amigo de China y Rusia.

Con el fin de movilizar el apoyo del mundo a esta toma de poder financiada por Occidente, Israel y los Estados del Golfo, se han utilizado diversos ardides propagandísticos que justifiquen otra violación flagrante de la soberanía de un país tras su exitosa destrucción de los gobiernos laicos de Iraq y Libia.

El contexto más amplio: la agresión en serie

El seudo intelectual francés Bernard Henry Lévy (izquierda) en compañía de sus compatriotas Laurent Fabius (centro) y Bernard Kouchner, alias "french doctor", respectivamente predecesor y posible sucesor del ministro de Relaciones Exteriores francés Alain Juppé, reunidos durante un meeting para una Siria "democrática", el 4 de julio de 2011. Estuvo ausente el líder centrista francés François Bayrou quien dejó un mensaje grabado. Este lobby logró convencer y hacer jurar a toda una asamblea, en la cual estaba incluso la responsable del partido ecologista, la Sra. Cécile Duflot, para una "democratización" de Siria bajo modelo aplicado en Libia.


La actual campaña occidental contra el régimen independiente de al-Assad en Siria forma parte de una serie de ataques contra los movimientos pro democracia y contra los regímenes independientes desde el Norte de África hasta el Golfo Pérsico. La respuesta imperial-militarista al movimiento democrático egipcio que derrocó la dictadura de Mubarak ha sido respaldar la toma de poder de la Junta militar y la campaña criminal de encarcelar, torturar y asesinar a más de 10.000 manifestantes a favor de la democratización.

Enfrentados a movimientos populares democráticos similares a los [de otras partes] del mundo árabe, los dictadores autocráticos del Golfo apoyados por Occidente aplastaron sus respectivos levantamientos en Bahréin, Yemen y Arabia Saudí. La agresión se extendió al gobierno laico de Libia, donde potencias de la OTAN lanzaron un bombardeo aéreo y marítimo masivo en apoyo de las bandas armadas de mercenarios destruyendo con ello la economía y la sociedad civil de Libia.

El despliegue de mercenarios mafiosos armados condujo a un ataque despiadado contra la vida urbana en Libia y a la devastación del campo. Las potencias de la OTAN eliminaron al régimen laico del coronel Gadafi y a él mismo asesinándolo y mutilándolo con sus mercenarios. La OTAN supervisó las lesiones, el encarcelamiento, la tortura y la eliminación de decenas de miles de civiles partidarios de Gadafi y funcionarios del gobierno. La OTAN respaldó al régimen títere cuando éste se embarcó en un sangriento pogromo contra ciudadanos libios de ascendencia africano-subsahariana, así como contra trabajadores inmigrantes africano-subsaharianos —grupos que se habían beneficiado de los generosos programas sociales de Gadafi. La política imperial de arruinar y gobernar en Libia sirve de “modelo” para Siria: crear las condiciones para un levantamiento popular dirigido por los fundamentalistas musulmanes, financiados y entrenados por mercenarios occidentales y los Estados del Golfo.

El sangriento camino de Damasco a Teherán

La Secretaria de Estado de EEUU, la Sra. Hillary Clinton, en compañía de sus homólogos extranjeros, el jeque Abdullah Bin Zayed Al-Nahyan de los Emiratos Árabes Unidos, el Sr. William Hague, del Reino Unido y Ahmet Davutoglu y de Turquía, pidiendo intervención "humanitaria" en la conferencia de "Amigos de Siria" 24 de febrero de 2012.


De acuerdo con el Departamento de Estado, el camino a Teherán pasa por Damasco: el objetivo estratégico de la OTAN es destruir al principal aliado de Irán en Oriente Próximo; para las monarquías absolutistas del Golfo el propósito es reemplazar una república laica por una dictadura teocrática vasalla; para el gobierno turco el propósito es fomentar un régimen dócil a los dictados de la versión del capitalismo islámico de Ankara; para al-Qaida y los aliados fundamentalistas salafistas y wahabíes, un régimen teocrático suní despojado de sirios laicos, alawíes y cristianos servirá como trampolín para proyectar poder en el mundo islámico; y para Israel, una Siria ensangrentada y dividida garantizará aún más su hegemonía regional. No fue sin previsión profética que el sionista por antonomasia estadounidense, senador Joseph Lieberman, exigiera días después del ataque de al-Qaida del 11-S de 2001: “Primero tenemos que ir a por Irán, Iraq y Siria” antes de considerar quiénes eran los verdaderos autores de los hechos.

Las fuerzas armadas anti-sirias reflejan una variedad de perspectivas políticas en conflicto ligadas únicamente por su odio común al régimen nacionalista, laico e independiente que ha gobernado la compleja y multiétnica sociedad siria durante décadas. La guerra contra Siria es la principal plataforma de lanzamiento para un resurgimiento del militarismo occidental que se extienda desde el Norte de África hasta el Golfo Pérsico, apoyada por una campaña sistemática de propaganda que proclama la misión democrática, humanitaria y “civilizadora” de la OTAN en nombre del pueblo sirio.

El camino a Damasco está lleno de mentiras

Combatientes del «Ejército Sirio Libre» (ASL). Integrado principalmente por mercenarios y fanáticos, financiados por las fuerzas armadas de Qatar, armados por parte de Turquía y dirigidos por Francia y Gran Bretaña, no es un ejército de Siria, ni libre.


Un análisis objetivo de la composición política y social de los principales combatientes armados en Siria desmiente cualquier afirmación de que el levantamiento persiga la democracia para el pueblo de ese país. La columna vertebral de la insurrección está integrada por combatientes fundamentalistas autoritarios. Los propios Estados del Golfo que financian a estos matones brutales son monarquías absolutistas. Tras haber endosado un brutal régimen de gánsteres al pueblo de Libia, Occidente no puede reclamar ninguna “intervención humanitaria”.

Los grupos armados se infiltran en las ciudades y se sirven de los centros de población como escudos desde los que lanzan sus ataques contra las fuerzas del gobierno. En el proceso, expulsan a miles de ciudadanos de sus hogares, tiendas y oficinas que utilizan como puestos militares avanzados. La destrucción del barrio de Baba Amro en Homs es un caso clásico de bandas armadas que utilizan a civiles como escudos y como carne de cañón para la propaganda en la demonización del gobierno.

Esos mercenarios armados no tienen credibilidad nacional entre la masa del pueblo sirio. Una de sus principales fábricas de propaganda se encuentra en el corazón de Londres, el denominado “Observatorio Sirio de Derechos Humanos”, desde donde se coordina estrechamente con los servicios de inteligencia británicos produciendo historias espeluznantes y atroces para agitar el sentimiento a favor de una intervención de la OTAN. Los reyes y los emires de los Estados del Golfo proporcionan estos combatientes. Turquía proporciona las bases militares y controla el flujo transfronterizo de armas y el movimiento de los dirigentes del llamado “Ejército Sirio Libre”.

Estados Unidos, Francia e Inglaterra ofrecen las armas, el entrenamiento y la cobertura diplomática. Yihadistas fundamentalistas extranjeros, incluyendo combatientes de al-Qaida en Libia, Iraq y Afganistán, han entrado en el conflicto. Esto no es una “guerra civil”. Es un conflicto internacional que enfrenta a una infame triple alianza de los imperialistas de la OTAN, los déspotas de los Estados del Golfo y fundamentalistas musulmanes en contra de un régimen nacionalista laico independiente.

El origen extranjero de las armas, de la maquinaria de propaganda y de los combatientes mercenarios revela el siniestro carácter imperial y “multinacional” del conflicto. En última instancia el violento levantamiento contra el Estado sirio supone una campaña imperialista sistemática para derrocar a un aliado de Irán, de Rusia y de China, aun a costa de destruir la economía y la sociedad civil de Siria, de fragmentar el país y de desencadenar prolongadas guerras sectarias de exterminio contra las minorías alawíes y cristianas, así como contra los partidarios del gobierno laico.

Los asesinatos y la huida masiva de refugiados no son el resultado de la violencia gratuita cometida por un Estado sirio sediento de sangre. Las milicias respaldadas por Occidente han cercado barrios por la fuerza de las armas, destruido oleoductos, saboteado el transporte y bombardeado edificios gubernamentales. En el curso de sus ataques han desbaratado servicios básicos esenciales para el pueblo sirio como la educación, el acceso a la atención médica, la seguridad, el agua, la electricidad y el transporte.

Por lo tanto, en ellos recae la mayor parte de la responsabilidad por esta “catástrofe humanitaria” (de la que sus aliados imperiales y los funcionarios de la ONU culpan a la seguridad y a las fuerzas armadas sirias). Las fuerzas de seguridad sirias están combatiendo para preservar la independencia nacional de un Estado laico, mientras que la oposición armada ejerce violencia en nombre de sus amos extranjeros que le pagan desde Washington, Riad, Tel Aviv, Ankara y Londres.

Conclusiones

El proyecto de reforma constitucional sometido a referéndum por el actual presidente sirio Bashar al-Assad fue aprobado por casi el 90% de los votos emitidos. 57,4% de los votantes acudieron a las urnas, más de 8 millones de sirios. Esta cantidad de votantes participando en estas votaciones fue la elección más importante realizada desde hace 60 años.

El referéndum al régimen de al-Assad el mes pasado atrajo a millones de votantes sirios desafiando las amenazas imperialistas occidentales y los llamamientos terroristas de boicot. Ello indica claramente que la mayoría de los sirios prefieren una solución pacífica y negociada, y que rechazan la violencia mercenaria. El Consejo Nacional Sirio respaldado por Occidente y el “Ejército Sirio Libre” armado por Turquía y por los Estados del Golfo han rechazado de plano los llamamientos de Rusia y China para un diálogo abierto y negociaciones que el régimen de al-Assad ha aceptado.

La OTAN y las dictaduras de los Estados del Golfo están empujando a sus representantes a luchar por un violento “cambio de régimen”, una política que ya ha causado la muerte de miles de sirios. Las sanciones económicas de Estados Unidos y Europa están diseñadas para destruir la economía siria a la espera de que la intensa privación impulse a una población empobrecida a los brazos de sus violentos subsidiarios. En una repetición del escenario de Libia, la OTAN propone “liberar” al pueblo sirio destruyendo su economía, su sociedad civil y su Estado laico.

Una victoria militar occidental en Siria únicamente alimentará el creciente frenesí del militarismo. Alentará a Occidente, a Riad y a Israel a provocar una nueva guerra civil en Líbano. Después de destruir Siria, el eje Washington-UE-Riad-Tel Aviv avanzará a una confrontación mucho más sangrienta contra Irán.

La horrible destrucción de Iraq, seguida del colapso posbélico de Libia proporciona un patrón aterrador de lo que le espera al pueblo sirio: un abrupto desmoronamiento de su nivel de vida, la fragmentación de su país, la depuración étnica, el gobierno sectario y fundamentalista de bandas mafiosas y la inseguridad total de la vida y de la propiedad.

Al igual que los “izquierdistas” y “progresistas” declararon que el brutal ataque despiadado contra Libia era la “lucha revolucionaria de demócratas insurgentes” alejándose después y lavándose las manos de la sangrienta secuela que ha dejado la violencia étnica contra los libios negros, repiten los mismos llamamientos a favor de una intervención militar contra Siria.

Los mismos liberales, progresistas, socialistas y marxistas que están pidiendo a Occidente que intervenga en la “crisis humanitaria” de Siria desde sus cafés y sus oficinas en Manhattan y en París, perderán todo interés por la orgía sangrienta de sus victoriosos mercenarios después de que Damasco, Alepo y otras ciudades sirias hayan sido bombardeadas por la OTAN hasta la rendición.

James Petras


Fuente: Red Voltaire
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EEUU no se decide a atacar: Siria tiene innovadores misiles rusos

Imponer una zona de exclusión aérea en Siria sería una misión difícil para las fuerzas extranjeras y requeriría grandes recursos porque el presidente Bashar Al Assad tiene un buen armamento ruso y un innovador sistema de defensa antimisiles, advirtió el jefe del Comando Central, general James Mattis, al Comité de Defensa del Senado estadounidense.
Rusia ha suministrado a Siria elementos para su sistema de defensa aérea integral: misiles, radares, etc.”, informó el general Mattis al explicar a los legisladores por qué resultaría difícil y costoso imponer una zona de exclusión aérea en ese país.

Entre los armamentos que Siria ha comprado a Moscú figuran los complejos costeros Bastión, dotados de los misiles antibuques supersónicos Yájont. Además, Damasco firmó un contrato para la compra de 36 aviones Yak-130.

Armas rusas, escudo ante la injerencia





La cooperación ruso-siria demuestra que Moscú no quiere apoyar el derrocamiento de los líderes de países soberanos. En caso de un conflicto entre el gobierno sirio y sus detractores, Moscú estaría preocupado por la posible llegada al poder de “fuerzas desconocidas” ante la caída del presidente Bashar al Assad, opina James Sherr, analista del Instituto Real de Asuntos Internacionales Chatham House.

Sin embargo, Irán sostiene que algunos países como EE.UU. e Israel también suministran armas pero ilegalmente a los opositores sirios. Además, el portal WikiLeaks informa que las tropas de la OTAN ya podrían estar allí entrenando a las fuerzas armadas rebeldes.

Rusia se niega a apoyar la nueva resolución de la ONU sobre Siria por estar en contra de la injerencia en los asuntos internos de un país independiente y querer evitar la repetición del ‘guión libio’. Esta actitud es respaldada también por el todavía primer ministro ruso Vladímir Putin, presidente electo.

Por otro lado, no solo las armas rusas llegan a Siria. Moscú ha donado casi un millón de dólares para apoyar las actividades de la Cruz Roja en ese país, además de preparar para la ONU una propuesta de misiones humanitarias ahí.

Fuente: Red Voltaire
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Los goles con la mano (Por Eduardo Aliverti)


Hablemos de ensaladas mediáticas. En rigor, una figura así conlleva la acepción de mescolanza. Hay de eso, pero después rige el sabor de un solo ingrediente.

El tratamiento de prensa, la última semana, acerca de la oferta gubernamental sobre subtes y colectivos junto con el nuevo rechazo de Macri merece uno de los sitiales destacados. No es novedad la protección periodística de que goza el jefe de Gobierno porteño, por parte de los órganos ya no tan hegemónicos. Igualmente, se sabe que no debe perderse la capacidad de asombro. Se intentó atribuir a consabidas manifestaciones piqueteras el aquelarre que fue la circulación de tránsito por el centro de Buenos Aires (tema de interés para los 40 millones de argentinos, según parece). Lo cierto es que el auténtico piquete consistió en los preparativos finales de una carrera automovilística, promovida por el gobierno macrista. La Nación tuvo, al menos, el recato de editorializar si los funcionarios de la ciudad autónoma se volvieron locos de remate, bien que sin caerle directo a la casi única figura imaginada para salir por la derecha cuando se pueda. Tampoco es novedoso que el periodismo militante de la oposición obvie, sistemáticamente, el estadio procesal de Macri. Pero hay que dejarse el espacio para la indignación, si no la sorpresa, cuando se lee cómo se las gastaron en el trato dado por la Legislatura al intento macrista de recibir el subte únicamente con obras y subsidios. El oficialismo porteño terminó apoyando dos pronunciamientos testimoniales de las huestes de Solanas. Uno adhiere al traspaso con recursos. Y el otro expresa ver “con agrado” que el Gobierno de la Ciudad retorne la tarifa del subte a la de antes del tarifazo de... Macri. Muy poco antes de eso, exactamente al revés de lo festejado por la/su bancada macrista, la vicejefa María Eugenia Vidal había dicho que retrotraer el costo del boleto es una decisión que le corresponde al gobierno nacional, y nunca al porteño. Una comedia imperdible, desopilante, que lejos de ser presentada como tal fue ofertada disimuladamente, no sea cosa de perjudicar a las tropas de Mauricio. Con iguales pretensiones, la propuesta presidencial de compartir con la Ciudad el subsidio a los colectivos, durante un año, obtuvo de título que Cristina deja a los colectivos sin subsidio. Y por ruta similar, o idéntica, de los funcionarios y legisladores nacionales que refirieron la honestidad de Boudou, se privilegió la cita de que las manos en el fuego no deben ser puestas a favor de nadie. En torno de esa máxima, se volvió a ensalzar las enseñanzas de Kirchner. Resulta que, para el periodismo independiente, el tipo a quien intentaron pulverizar porque era un desencajado, un desquicio anímico, un rencoroso generacional, un travestido ideológico, es ahora la quintaesencia del político que sabía negociar, el moderado, el custodio de no llevar los conflictos hasta las últimas consecuencias. Qué falta que hace Kirchner, se lee y escucha en las bocas de lobo de las usinas periodísticas del bando opositor. Cuánto que se lo necesitaría hoy para trazarle límites a la yegua que, post mortem, lo corre por izquierda. No tienen vergüenza. En la entrada de la columna de Eduardo van der Kooy, ayer, se traza la imagen de un Boudou abatido, en su despacho del Senado, repitiendo que “Cristina sabía todo. No sé por qué me han tirado los perros así” (“¿me han?”). Según el editorialista, sólo escucharon al vice algunos amigos suyos que no se pusieron de acuerdo, únicamente, en si se largó a llorar o apenas se tomó la cara (detalle sustantivo, como se comprenderá). En concreto, desde la intimidad de Boudou le contaron a Van der Kooy, con pelos y señales, una escena que muestra al vice completamente quebrado. Si algo ni siquiera es verosímil, no vale la pena detenerse en si acaso podría ser verdad.

Los controles oficiales en la importación de libros también dieron lugar a una manipulación sublime. El jueves pasado, en Clarín, el título principal de portada daba cuenta de un bloqueo aduanero total a los textos impresos en el extranjero. Pero el desarrollo de la noticia fue remitido con exclusividad a la página 39, en cuya nota no hay una sola mención de fuente propia con nombre y apellido excepto por dos que al cabo mueven a risa porque, justamente, contradicen el sentido que el diario da a la información. El presidente de la Cámara Argentina de Publicaciones, Héctor Di Marco, afirma que tomarán contacto con las autoridades porque “por ahora, sólo tenemos suposiciones” (sobre la medida de la Aduana). Sin embargo, según el mismo directivo y siempre en la misma nota, el supuesto es que, simplemente, se trataba de “verificar todos los contenidos de los containers, para ver si se ajustan a las declaraciones”. La mención nominada restante corresponde a Isaac Rubinzal, presidente de la Cámara Argentina del Libro, quien no sólo ya había negado que hubiera libros interdictos sino que, respecto de las entregas, sostiene que “no es un volumen significativo, son monedas”. Lo demás es “cuenta un editor”; “cuentan”; “explican los editores”; “decía” el director de la filial argentina de una editorial multinacional; “un” editor “se burló” de que sólo quieran controlar la tinta con plomo; “confiaban” desde una editorial. El mismo jueves, en Página/12, el artículo de Javier Lewkowicz abundaba en fuentes abiertas allí donde Clarín consigue solamente off the record. Que un diario tenga simpatía con el oficialismo y el otro esté en guerra declarada no guarda relación alguna con la calidad profesional respecto de las fuentes empleadas y el uso de potenciales. Para la nota de Lewkowicz opinaron sin problemas desde el Grupo Santillana, más Carlos Artigas, gerente de importaciones de Editorial Atlántida, y Juan Carlos Manoukian, director de Ediciones Circus. Todos –incluyendo a Di Marco y Rubinzal, nada menos que los responsables máximos de las dos cámaras representantes de los editores del país– coincidieron en descartar, con aportes numéricos y conceptuales, el tremendismo que Clarín, y otros medios y periodistas, imprimieron a un hecho por el cual quiso esparcirse algo así como que la Argentina se queda intelectualmente aislada del mundo. ¿Tanto les hace falta inventar o manipular de esta manera? Tomar noticias a partir del procedimiento mediático que sufren no debería ser un ejercicio habitual. Pero continúa siendo imprescindible, porque es a partir de allí como se entienden mejor las noticias propiamente dichas.

Como suele decirse, y ya supimos apuntar en esta columna, a propósito de una de las formas en que cabe medir la diferencia de categoría periodística entre un profesional y un aficionado, los goles se pueden meter con el pie, la cabeza, el pecho, la espalda, el culo. Pero nunca con las manos. Y lo que está ocurriendo en el periodismo argentino, ante todo por la realidad indesmentible de que algunas corporaciones de prensa y aledaños ocupan el sitio de la oposición partidaria, parlamentaria, institucional, es que aumentan los ilícitos. No digamos legitimidad: podríamos hacerlo si cada quien reconociera abiertamente el lugar desde donde dice, informa, juzga, titula, entona, gesticula. No es el caso. El periodismo al que se denuesta como “militante”, si es por eso, acaba por ser infinitamente más auténtico que el salvajismo de la oposición periodística autoinvestida con su lucha por la libertad de prensa. Que vaya si la tienen. Y de profesionalismo, que vaya si les falta. De por sí, vender como existente la objetividad es una estafa. Si además pretende revestírsela de independencia analítica en medio de una guerra de intereses como se vio pocas veces o ninguna, estamos frente a un fraude escandaloso.

Que se haga cargo cada quien dispuesto a aceptarlo, en su lectura de la realidad.

Fuente: Pagina 12
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"Una pulga no puede picar a una locomotora, pero puede llenar de ronchas al maquinista" (Libertad, amiga de Mafalda)