2.4.08

Noticieros y Ciencia Ficción: Un sólo corazón...!!!

El hombre evoluciona o involuciona por períodos históricos. La ciencia siempre da un paso más adelante sin saber si frente a sí hay más camino o un despeñadero. La mentalidad se va modificando social e individualmente. La forma de trabajar, de convivir, de aprovechar el tiempo de ocio, la alimentación... todo cambia constantemente.
A veces nos adaptamos fácilmente, otras no tanto. Y hay veces que la "modernidad" nos resulta bastante insoportable.
Sin dudas que uno de los rubros que más se ha desarrollado es el de la comunicación. Hablo de los medios de comunicación, porque entre nosotros pareciera que cada vez es más primitiva. Estamos más aislados que antes, más solitarios, más desconfiados.
Entre todos los medios a nuestra disposición, la televisión es el que penetra más profunda y violentamente en la vida de todos. Siendo un instrumento tecnológico tan impresionante y con tantas posibilidades, nunca o casi nunca fue usado como debería haberse usado. Hoy más que nunca es un arma de control social. Un poderoso vendedor de ilusiones y de porquerías.
Un elemento dañino porque es utilizado para la manipulación constante.
Solamente refiriéndome al tema de los noticiosos puedo mencionar la omisión de temas que serían de absoluta relevancia para la sociedad. O si no se omiten noticias, se ocultan. También se disfrazan, contándolas desde el ángulo que le interesa a la empresa periodística o al poder político que representa o que le asegura rentabilidades futuras.
Ya hace mucho (si es que existió alguna vez) que no hay más "periodismo independiente". Automáticamente desconfío de aquellos periodistas que se hacen autobombo con su condición de "independientes". Pura "cháchara". Verso.
Ahora sólo existen grandes empresas que no solamente son dueñas de canales de televisión, de radios, diarios y otras formas de comunicación como internet... sino que han ido ramificando sus inversiones en otros rubros. Pueden imprimir un diario como fabricar chupetines, por exagerar un poco. Lo cierto es que además tienen intereses muy fuertes en publicidad con otros grandes grupos económicos y no conviene dar determinadas noticias que pueden llegar a afectar su relación comercial. No hace falta que me extienda en otro tipo de condicionamientos: los políticos, por ejemplo. Hasta los religiosos, inclusive. Depende de qué lado sea el que le ofrece más garantía de buenos negocios o "negociados" para que todo su potencial comunicativo se ponga al servicio del oficialismo gobernante o de la oposición.

Tengo (o creo tener) certeza de algunos manejos de opinión pública en algunos hechos puntuales.
Hace unos años empezaron a proliferar de un día para otro los robos cometidos por taxistas contra sus pasajeros. Todos los santos días ocurrían dos o tres casos. Se pontificaba desde un canal de televisión que la solución era que los taxis tuvieran el sistema de "radio-taxi" como en otras ciudades del mundo, porque así los choferes tendrían que estar registrados en la empresa proveedora del servicio. Consecuencia: después de meses de campaña, empezaron a proliferar las empresas de radio taxi porque la gente ya no quería subir a los taxis que no tuvieran radio. Los taxistas se vieron obligados a pagar un dinero diario para poder ostentar los carteles de una de éstas empresas para que la gente estuviera segura (?). Claro, para poder montar éste sistema hubo que importar miles de equipos de radio. Como suelo pensar mal, enseguida empecé a elucubrar una connivencia entre la empresa periodística y algún importador o cosa semejante. O que el mismo pull periodístico fuera el que tenía su negocito extra con la importación de los equipos. La cuestión es que mágicamente, cuando ya casi no quedaba taxista que no hubiera tenido que resignarse a ser empleado de otro, desaparecieron todos los taxistas ladrones de un día para otro, así como habían aparecido.
Poquito tiempo despuès, los noticieros de radio y televisión, más el diario que forma parte de ese mismo grupo periodístico empezó a darle manija al robo de las casas y de los autos. Todos los días aparecían casos de casas desvalijadas. Solución: las alarmas. Antes de esto, casi no existían estos elementos en la vida cotidiana de los argentinos.
Empezaron a aparecer alarmas antirrobo por todas partes. Casas y autos se convirtieron en insoportables productores de polución acústica porque a cada rato se les disparaba la alarma por cualquier estupidez y todo el vecindario sufría y sufre las consecuencias. Por otro lado, esto es tan común que cuando una alarma se dispara, nadie le da ni cinco de pelota.
Cuando el negocio estuvo armado, mágicamente también empezaron a mermar los casos de robos de casas o autos. Claro, los desarmaderos de autos siguen vivitos y coleando... pero los noticieros ni se enteran.
Ellos hicieron su negocio, pero instalaron el miedo. Porque inseguridad es cierto que hay, pero no mayor a la que hubo siempre. Es más, hay relevamientos que indican que disminuyó, pero la gente sigue con miedo de cualquiera que pasa a media cuadra de distancia.
No sé qué sucedería si Buenos Aires no fuera Buenos Aires, sino San Pablo, Nueva York o cualquier otra ciudad grande de América, donde los datos son escalofriantes en estos temas. Todavía Buenos Aires sigue siendo una de las ciudades más seguras. Créase o no.

Lo que acabo de decir es sólo la cascarita de la realidad de nuestros medios de comunicación. Es, si se quiere, naif... Hay que tener mucho cuidado de a quién escuchamos y en quién confiamos. Yo diría que no le demos carta blanca a ninguno de ellos. Menos aún a los que cacarean su "independencia"

Lo bueno de lo pésimo que es toda la televisión es que tengo más tiempo para hacer muchas otras cosas....


"Una pulga no puede picar a una locomotora, pero puede llenar de ronchas al maquinista" (Libertad, amiga de Mafalda)